Como dijera pumba, jabalí cuando provocaron a timón, suricato, personajes de la película infantil El Rey León, “se armó la gorda”, haciendo alusión de que la provocación tendría reacciones en contra de quienes en ese momento tenían el poder.
Justo eso parece estarle pasando al presidente ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR con los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Pues el `presidente quiere que en la cuarta transformación los magistrados también sean de cuarta, totalmente sometidos, bueno, en realidad, siempre han servidos de una manera u otra al sistema, quizá no con sometimiento total, como ahora quieren que sea pero igual vendían caros sus favores.
Pero ahora que el legislativo atendiendo instrucciones del ejecutivo quieren hacerlos perros del mal, que se les lanzan encima, pues los magistrados, como timón y pumba, defienden sus intereses, y claro su autonomía.
Todo dio inicio porque les querían reducir el sueldo, que la verdad, eso de bajarles su dieta a los ministros hoy se ve más un tema político y que el ejecutivo quiere tener todo el poder.
El tema de los salarios de los magistrados ha subido de tono, ya cruzo a otras dimensiones, por primera vez en la historia de México la Suprema Corte sale a dar explicaciones y a defenderse de acusaciones.
Igual ellos tienen razón en algunos puntos, el presidente no puede tener sometido a todo el aparato de justicia de la nación, se necesita también el equilibrio y si como los ministros dicen no ganan lo que se les adjudica pues están en su derecho de defenderse.
También, aunque muchos mexicanos no lo crean, es bueno para el pueblo que hoy los magistrados de la Suprema Corte pongan distancia del ejecutivo nacional, insistimos, es equilibrio, evitara un sistema totalmente autoritario con todos los poderes sometidos al servicio del sistema.
Cierto es que los magistrados han sido muy criticados por sus onerosos sueldos y en algunos casos su mal actuar, pero hoy, a diferencia de otros tiempos es bueno que marquen una postura y el presidente no debe desacreditarlos tan airosamente, es más, LOPEZ OBRADOR debería atender la recomendación de su Secretaria de Gobernación quien dice deben dialogar con los jueces y magistrados porque eso es sano para el país.
De hecho la misma Secretaria de Gobernación, OLGA SANCHEZ CORDERO, dice que no se puede violar la ley de remuneraciones salariales bajándoles el sueldo a los magistrados, está en decreto de BENITO JUAREZ, pueden los de nuevo ingreso entrar con un salario menor al que gozan los actuales pero los que están en funciones y gozan de esa remuneración desde ya hace años no se puede disminuir de la noche a la mañana.
Por lo tanto si ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR es tan juarista, como dice serlo, debe de saberlo. A todas luces se ve que el asunto es más de demostración de poder que de razón o buena acción.
Bajar los sueldos de los magistrados, los diputados y nuevos funcionarios es una promesa de campaña y al pueblo le agrado, pero a sus funcionarios, el presidente, puede marcarles tope de sueldo, incluso a los nuevos legisladores, pero no a los que ya estaban en funciones, como es el caso de los ministros de la Suprema Corte.
Quizá tenga que revisarse la ley y cambiarla completa, pero por ahora los magistrados tienen con que defenderse, más aun, tienen elementos que alegar, pues los legisladores que pudieron bajarse el sueldo no lo hicieron supuestamente porque no llegaron a un acuerdo, obvio, ninguno iba acordar ganar menos, pueden ser burros, rijosos y varios de ellos incapaces y corrientes pero tontos no son para querer ganar menos que los de la legislatura pasada.
En fin, la situación es que al presidente y sus legisladores se les está, como dijera la abuela cuando algo se dificultaba, poniendo color de hormiga porque el tema ya no es solo la disminución de remuneraciones salariales de los ministros, ahora parece juego de vencidas, tal parece que a LOPEZ OBRADOR con los magistrados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación se le armó la gorda.